Ilustre Cofradía del Santo Sepulcro de Gijón

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Descripción

La fundación de la Ilustre Cofradía del Santo Sepulcro data del 11 de abril de 1942, habiéndolo sido por el Ilmo. Sr. D. José Rodríguez de Bustamante, Caballero de la Ínclita y Soberana Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén.

La Cofradía fija su domicilio canónico en la Capilla de Nuestra Señora de la Soledad, calle de la Soledad número 2, 33201-Gijón, dependiente de la Parroquia Mayor de San Pedro Apóstol de Gijón. El domicilio social se fija en la calle Maximino F. Marino, nº 2, primer piso, oficina nº 2-33201 Gijón. Se dispone, asimismo, de un apartado de correos nº 613 de la oficina principal de Correos en Gijón (33206)

Tiene como finalidad básica:

Promover el culto público a través de desfiles procesionales y celebraciones litúrgicas que conmemoren la muerte y resurección de Nuestro Señor Jesucristo, así como la especial devoción a María Santísima en su Soledad y Gozo.
Promover la realización de obras asistenciales y caritativas entre los más necesitados, fomentando también un auténtico sentimiento de hermandad entre sus miembros, y colaborando con la jerarquía eclesiástica en cuantas iniciativas se promuevan en consonancia con sus estatutos.
Encaminar a sus miembros a colaborar en actividades de carácter social y cultural como una de las expresiones de caridad cristiana y de acercamiento a la Fe.

Titulares de la Cofradía son el Santo Sepulcro, muestra de la pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo, y la Resurrección, testigo excepcional de la del Señor y símbolo de nuestra esperanza en la vida eterna. Asimismo, la Cofradía se pone bajo la especial protección de la Santísima Virgen en su Soledad y Gozo y de San Pedro Apóstol, tomándolos como copatronos de la Cofradía.

La Cofradía del Santo Sepulcro desarrolla, entre otras, las siguientes actividades:

Organizar la Solemne procesión del Santo Entierro de Cristo, el Viernes Santo.
Organizar la procesión de la Soledad de María, el Sábado Santo.
Organizar la Solemne procesión del encuentro de Resurrección, el Domingo de Resurrección.
Colaborar en la organización de la procesión de la Soledad de María, en el mes de septiembre.
Conmemorar las siguientes festividades propias del Santo Sepulcro: San Pedro, 22 de febrero; Llagas Gloriosas, viernes 2ª semana de Pascua (imposición de medallas a los cofrades); Aniversario fundación de la Cofradía, 11 de abril (imposición de medallas a los cofrades); Preciosa Sangre de Cristo, 1 de julio; Nuestra Señora, Madre de la Esperanza, 9 de julio; Santa María Magdalena, 22 de julio (mujeres cofrades); Nuestra Señora de la Soledad, domingo siguiente al 15 de septiembre (Triduo), Santa Elena (18 de agosto); San Juan Evangelista, 27 de diciembre (hombres cofrades); San Alberto de Jerusalén, 12 de septiembre (imposición de medallas a los cofrades); Dedicación de la Basílica del Santo Sepulcro de Jerusalén, 15 de julio.
Conmemorar aquellas otras fiestas propias del calendario de cultos de la Orden del Santo Sepulcro de Jerusalén.
Conmemorar las festividades de carácter general de la Iglesia Católica.
Celebrar al menos una misa anual por los cofrades fallecidos.
Como cultos mensuales se fijan los terceros jueves de cada mes en la Capilla de la Soledad o en el oratorio de los locales sociales de la cofradía.
Celebrar los vía crucis y vialucis propios de la Cuaresma y de la Pascua a realizar los miércoles y viernes en la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol.
Visitar y atender a los ancianos.
Colaborar en iniciativas individuales o colectivas cuyo objeto sea ayudar a nuestros hermanos necesitados.
Participar y fomentar las actividades de formación cristiana bajo la dirección del Rector de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, de Gijón.
Cualquier otra actividad relacionada con la finalidad de la Cofradía.

El emblema de la Cofradía es la Cruz del Santo Sepulcro, quíntuple potenzada, en color rojo sobre campo blanco. La Cofradía dispone de un pendón y un estandarte de tela blanca, ribeteada en rojo, con la Cruz del Santo Sepulcro de Jerusalén, también, en rojo.

El hábito de la cofradía es una túnica blanca con botonadura y bocamangas rojas, guantes blancos, capillo de terciopelo o capirote de tela rojos, correa de cuero negra, capa blanca con el emblema de la Cofradía bordado en rojo en el costado izquierdo (a la altura del pecho) de diámetro 17 cm, cirio o vara, y medalla de la Cofradía en el pecho. La camisa y guantes, blancos. El calzado, corbata y calcetines, negros; el pantalón, azul marino o negro.

La Junta de Gobierno y cuantos cofrades se estime conveniente podrán portar Vara alta de la Cofradía.

En los actos de la Cofradía en los que no se lleve hábito, los cofrades llevarán, a poder ser, camisa blanca y calcetines, calzado y corbata negra, pantalón gris y americana azul marino. En cualquier caso, en estos Actos llevarán siempre la medalla acreditativa de la condición de Cofrade.

Fuente: Ilustre Cofradía del Santo Sepulcro (Gijón, Asturias).

Concejo de Gijón

Prehistórico y romano, revolucionario, urbano, minero, metalúrgico, vanguardista, marinero, cosmopolita, festivo y hospitalario. Así es el concejo de Gijón.

Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Gijón son: Carreño, Corvera de Asturias, Llanera, Sariego, Siero y Villaviciosa. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Gijón, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.

Comarca de Gijón

Prehistórico y romano, revolucionario, urbano, minero, metalúrgico, vanguardista, marinero, cosmopolita y festivo, culto y hospitalario, y también rural. Así es el concejo de Gijón.

La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Gijón. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.

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«La fabada asturiana no solo es un plato delicioso, sino que también es un símbolo de la cultura asturiana y de su tradición culinaria. Es un plato reconfortante y sustancioso, perfecto para los fríos inviernos del norte de España. Además, es muy apreciado y valorado en todo el país, e incluso ha trascendido las fronteras para convertirse en un referente de la gastronomía española en el mundo.»